TikTok Shop y el auge del fraude online impulsado por Inteligencia Artificial

La última ola de fraude en marketplaces tiene un nuevo protagonista: la inteligencia artificial generativa. 

El auge de TikTok Shop, que prometía revolucionar la experiencia de compra con vídeos y contenido viral, se ha visto rápidamente empañado por una explosión de listados falsos, productos inexistentes y vendedores fantasma, todo facilitado por la IA.​

Fraude a escala industrial: el papel de la IA generativa

Ya no estamos ante pequeñas estafas amateur. Nicolas Waldmann, responsable de gobernanza de TikTok Shop, lo ha definido sin rodeos:

«Esto es crimen organizado, siendo sinceros. Básicamente, lo que intentan hacer es vender y, por supuesto, no entregar nunca nada, para luego largarse con el dinero.»

Los estafadores utilizan modelos generativos de IA para crear imágenes hiperrealistas, descripciones optimizadas para SEO y vídeos que mimetizan el estilo de los creadores originales. Hoy en día, crear una marca entera—desde el logo hasta reseñas ficticias—puede hacerse en minutos y sin apenas dejar rastro.​

Las cifras hablan por sí solas. Según un informe publicado por la compañía recientemente, solo en el primer semestre de 2025, TikTok Shop bloqueó más de 70 millones de productos fraudulentos y eliminó 700.000 vendedores por incumplimiento de políticas, con un aumento del 40% respecto al periodo anterior. El motivo: las bandas organizadas han industrializado el fraude gracias a herramientas de IA accesibles a cualquier usuario.​

El nuevo manual de los estafadores

Los informes recogen el mismo patrón: los estafadores crean tiendas de la nada, llenas de catálogos generados, packaging ficticio y vídeos cortos narrados por IA. Prueban precios, escalan anuncios y realizan tests A/B detallados con bots, logrando optimizar sus probabilidades de captación y eludiendo los filtros convencionales de las plataformas. Incluso los documentos para abrir cuentas de vendedor son manipulados con IA, dificultando la acción preventiva.​

A esto se suma la proliferación de hasta 15.000 dominios fraudulentos que imitan la apariencia de TikTok Shop. Diseñados para instalar malware y robar criptomonedas, especialmente entre jóvenes compradores motivados por descuentos imposibles. La sofisticación de estos ataques ha evolucionado hasta incluir campañas de phishing con contenido completamente falso.​

 Pantalla de móvil con una página de producto y varias etiquetas “AI Generated” apuntando a la imagen, título y descripción; aparece el icono de TikTok Shop y un símbolo de advertencia, aludiendo a cómo la Inteligencia Artificial Generativa puede usarse en E-commerce para Fraude y Estafa.

El reto de recuperar la confianza en la plataforma

El impacto va más allá de las pérdidas económicas. Los fraudes masivos erosionan la confianza en el canal y en la marca, generando un efecto dominó en toda la industria. Si un usuario pierde dinero por comprar un producto inexistente, es improbable que vuelva a confiar en la plataforma. Y si casos virales de estafa recorren las redes, la percepción de inseguridad se multiplica, afectando a comercios legítimos.​

A nivel global, el comercio de falsificaciones representa ya un porcentaje relevante del total mundial de ventas online, causando daños tanto en términos de reputación como de ingresos y recaudación fiscal.​

La reacción de TikTok Shop ha sido apostar por una estrategia “cazador vs. cazador”: la plataforma utiliza inteligencia artificial para combatir la IA fraudulenta. Su sistema combina algoritmos de visión computacional, modelos de lenguaje natural para detectar eslóganes engañosos, y análisis gráfico de cuentas para identificar patrones sospechosos antes de que los anuncios lleguen al usuario.​

Además, la plataforma intensifica las verificaciones de identidad y aplica sanciones transversales que dificultan el regreso de los infractores. Sin embargo, el propio equipo reconoce que se trata de una contienda en constante evolución, muy similar a la batalla de spam y malware vivida en los últimos años en otros sectores digitales.​

¿Qué más se puede hacer? Soluciones y oportunidades propuestas

Los expertos y las marcas promueven una defensa multicapa que combine diferentes perfiles de autenticación, onboarding más exigente, pagos en custodia y verificación reforzada para nuevos sellers

En el lado regulatorio, los organismos internacionales exigen a los marketplaces una acción mucho más proactiva y transparencia en sus reportes de fraude.​

A nivel técnico, se demanda una colaboración mayor con los titulares de derechos y el desarrollo de señales estándar de autenticidad: desde el uso de serialización de producto hasta recibos digitales verificables.​

Educación y prevención: el mejor antídoto

Al final, la tecnología y la formación van de la mano para blindar el futuro del e-commerce. Frente a estafas cada vez más sofisticadas, incorporar sistemas de IA capaces de analizar miles de patrones en tiempo real es solo el primer paso: la clave está en una mejora continua, aprendiendo del comportamiento de los usuarios y adaptando las defensas según evolucionan las tácticas de los defraudadores.​

Pero la prevención no depende solo de las herramientas. Crear una cultura digital en la que consumidores puedan identificar señales de alarma y vendedores colaboren entre sí y con las plataformas resulta fundamental para minimizar los riesgos. Invertir en monitorización adaptativa y verificación inteligente ayuda a proteger cada operación, sin sacrificar la experiencia del usuario.​

La batalla contra el fraude en TikTok Shop y otras plataformas acaba de comenzar. Si algo enseña el pulso actual entre inteligencia artificial y ciberdelincuencia es que solo la innovación constante y el trabajo conjunto permitirán mantener la confianza en el comercio digital y crear espacios seguros para consumidores y marcas.​